Capitulo 16: Discutir sin mal humor.

─Que bueno que lo entiendas hija─Contestó papá aliviado mientras me abrazaba.

─Siempre has sido tan especial─Dijo Bere mientras se paraba del sofá y me abrazaba igual. Papá también pasó su brazo por los hombros de Bere y nos abrazamos los tres.

─Ahí hago falta yo─Dijo Carla mientras se unía a nuestro abrazo.

─Aquí me hace falta una más, mi Stephanie─Se quejó papá.

─Aquí estoy pa─Dijo Stepha entrando al living seguida por Michael.

─¿Quieres unirte al abrazo, hija?─Le preguntó papá y esta se adentró más al living y también se unió a nosotros─Ahora si tengo mi familia completa─Nos abrazó más fuerte.

Me sentía genial en este momento, se me removía todo y más el estómago. No había almorzado.

─Ustedes no se sientan ofendidos muchachos─Les empezó a decir papá mientras deshacía el abrazo, cada una se fue para su puesto─Ustedes también son mi familia, pero ellas cuatro son mi vida y mi motivo de existencia, ustedes me entenderán─Se río y ellos lo siguieron.

─Yo lo entiendo perfectamente, he pasado por todo en este tiempo y un motivo de su existencia casi me deja sin vida─Se quejó Taylor.

─No exageres─Le pedí mientras volvía a sentarme en sus piernas.

─¿Cómo querías que siguiera viviendo si ya no tenía un hermoso fruto en ti y tu no querías volver?─Hizo la pregunta más errada del planeta.

El gesto se me descompuso completamente.

─La cagué─Avisó mientras se movía y me cogía de los hombros para girarme y hacer que lo viera a la cara─Lo siento amor, yo no quería decir eso─Se disculpó.

─No tienes porque sentirlo─Mi voz salía en susurros─Tu no tienes la culpa─Luché con todas mis fuerzas para que no se me saliera ninguna lágrima.

─Amor, ¡Por favor! No vayas a llorar─Me suplicó─¿Vamos a hacer otro?─Preguntó mientras me sonreía. Me hizo reír.

─No seas tonto─Le di una pequeña palmadita en el hombro, se me había olvidado completamente que teníamos acompañantes en el living.

─Ya la contentaste─Avisó papá─¿Vamos a ver una película?─Nos preguntó a todos.

─Sí, vamos al cine─Contesté emocionada.

─Yo no estaba pensando en cine, pero bueno, vamos─Dijo papá como haciéndose el rogado.

Le saqué la lengua y todos fuimos al garaje. Cada pareja se subió en su auto. Eso pasa cuando roban la única camioneta que había en la familia, y más la tuya.

─No tengo auto─Le hice otro puchero a Taylor.

─Luego lo conseguimos─Dijo mientras colocaba los ojos en blanco.

─¿En serio quieres hacer otro hijo?─Le pregunté curiosa mientras me colocaba el cinturón.

─Si tu quieres, yo quiero─Contestó encogiéndose de hombros.

─Amor, no me la cambies ¿Eh?─Lo miré sonriente.

─¿Qué te estoy cambiando?─Preguntó inocente.

─¿En realidad quieres un hijo?─Volví a preguntarle.

─Si tu quieres, yo quiero─Respondió con la misma pregunta.

─¡Taylor!─Chillé.

─¿Qué pasa?─Chilló remedando mi voz.

─No me respondas con esa pregunta. Si te vuelvo a preguntar es porque quiero otra respuesta─Le dije como si fuera muy obvio.

─No es obvio─Respondió haciendo mi mismo gesto.

─¿Quieres, en realidad?─Le pregunté de por tercer vez.

─¿Qué quiero?─Preguntó como si no supiera que estaba preguntando.

─¡Taylor!─Volví a chillar y este sólo se reía─ Contéstame, me estas torturando─Me quejé.

─Yo ya te había contestado, si tu quieres, yo quiero─Estaba a punto de metérmelo por donde la mamá lo tuvo.

─Hagamos esto así. Yo haré lo que tu quieras, ¿Tu quieres?─Volví a preguntarle. Estaba segura que esta sería la última vez que le preguntaría, si no me respondía entonces dejaría el tema ahí.

─¿Quieres la verdad?─Preguntó acabando con mi paciencia.

─¡Ay Taylor! No me jodas─Le mostré mi dedo del medio y seguí mirando por la ventanilla.

Él no paraba de reír, no le veía nada gracioso y quería entenderlo pero...No, en realidad, no quería entenderlo.

─¿Te enojarás?─Preguntó mientras me acariciaba la cara.

─Ya lo estoy─Respondí secamente mientras movía el cabello para que lo tocara a él y no a mi cara.

─Eres todo un lío, ¿Quién puede contigo?─Preguntó tratando de escondes sus risas.

─Tu puedes conmigo, ¿Estoy equivocada?─Volví a preguntar secamente, todavía no estaba contenta.

─¿Sabes? Cuando dejes el mal humor seguimos discutiendo, ¿Vale?─Dijo  sin dejar de sonreír.