Capitulo 1, 2, 3 & 4.

POV. Taylor

¿Seré capaz de decir lo que pasó? ¿Cómo lo tomará? Las lágrimas no paraban de salir de mis ojos y cuando miré su hermoso rostro una mejilla estaba húmeda y salió otra lágrima, la sequé, besé su frente y ella empezó a parpadear y luego gritó.

-¡ME DUELE! ¡MARICA! ¡ME ESTA DOLIENDO MUCHO!-Trato de zafarse de mi brazo con tanta fuerza que me toco pararme y obligarla a que me mirara a los ojos.

-¡Amor! ¿Qué es lo que te duele?-Pregunte preocupado.

-…Nada…-Abrió bien sus ojos y miro a su alrededor-Ya no me duele nada…¿Estoy bien? ¿Cuánto tiempo llevo aquí?-Pregunto mientras seguía observando cada parte de su alrededor, pero nunca se había detenido a ver su cuerpo. Iba a bajar la cabeza y mirar su estómago o eso pensé y la volvió a subir-¡No quiero ver!-Tenia la voz entrecortada. Se me escapó otra lágrima.

-¿No quieres ver qué?-Mi voz salió aguda y quebrantada.

-Las agujas en mi piel…No me gustan-Dijo tapándose los ojos. ¿No vio lo que debía ver? Sería mejor si lo supiera o adivinara y yo no tuviera que decir esas palabras-¿Por qué lloras amor?-Pregunto de repente y tratando de levantar su mano para tocarme pero se lo impedían las agujas.

-Solo que…-No era capaz de decir nada…Por más que quisiera nada salía de mi boca. Agaché la mirada hacia su estómago, ella miro la misma dirección y abrió sus ojos como platos.

-¿Qué pasó Taylor?-Solo me llamaba así cuando estaba enojada o cuando no entendía nada-¿QUÉ PASO TAYLOR LAUTNER?-Grito mientras sollozaba.

-Perdiste..El..Be…Bebé-Tartamudee y otras lágrimas cayeron en mis mejillas.

¿QUÉ?-Pegó un grito ahogado-ESTO NO PUEDE SER CIERTO-Empezó a gritar-NO, NO, NO, NO. ¡Mi BEBÉ!-Gritaba como loca mientras lloraba y tocaba su estómago-¡MALDITA SEA! ¡NO!-Llegó el doctor y unas enfermeras, me apartaron del lugar y las enfermeras me sacaron de allí.

POV. ____(tn)

-¡ESTO NO PUEDE SER CIERTO! ¿POR QUÉ? ¡MI BEBÉ! ¡MI BEBÉ!  ¡DEMONIOS! NO, NO, NO-No para de gritar y sollozar, ahora me dolía más que las punzadas de hace horas. ¿Por qué se había ido la persona que haría de mi vida una jodida perfección? Alejaron a Taylor de mí y luego mis parpados me obligaron a cerrar los ojos. Todo volvió a la oscuridad y luego llegué a la inconciencia.

Volví a abrir mis ojos y ya estaba en un lugar muy conocido y acogedor para mi gusto. Estaba en mi habitación, me giré levemente y despacio para ver todo mi alrededor y cuando miré a mi lado vi a un Taylor agotado, dormido, con su pecho desnudo, su nariz rojiza y sus mejillas mojadas. Me giré de nuevo y al recordad lo sucedido nuevas lágrimas caían en mis mejillas. No había planeado nada de eso pero estuve por obtenerlo y ya lo amaba. ¿Por qué la vida me arrebata lo que es importante para mí?

-¿Amor? ¿Estas despierta?-No hable ni me giré-¿Estas llorando?-Tampoco respondí, él se acercó a mí y me giró. Cerré mis ojos pero seguí llorando.

-¿Por qué?-Dije con la voz ronca.

-Amor…-Fue lo único que dijo y me abrazó, me aferré a su cuerpo, no paraba de llorar y cada vez nos aferrábamos uno del otro. Volví a quedarme dormida y él también lo hizo.

Mientras veía tv escuche que la puerta se abrió, me giré para mirar quien entraba y no tocaba la puerta y vi a Taylor con un plato en una mano y en la otra mano una soda. Seguí viendo tv como si no hubiera visto nada y de repente Taylor se me sentó en frente. Cogió la cuchara e intento metérmela en la boca pero yo  no lo abría. Alejé su mano y cuando vi la cuchara lejos abrí la boca.

-No comeré nada Taylor-Dije seria-Me obligas a comer y sabes que te vomitaré en tu maldita cara-Estaba harta de que trataran de obligarme a comer.

-Maldita-Repitió y se paró de la cama para irse de la habitación.

-¡Amor lo siento!-Me paré encima de la cama y me adelante para no dejarlo caminar más-En verdad lo siento. Yo no quiero ser así contigo.

-¡Demonios ____(tn)! ¿Qué mierda está pasando? Nunca habíamos peleado en esos cuatro meses y ahora desde hace tres meses peleamos por lo que sea-Ya estaba cansado de eso y yo también.

-Amor-Dije mientras una lágrima caía por mi mejilla-Yo estoy cansada de esto y sé que tú también lo estás. Eso me está dañando más y me está destruyendo poco a poco por dentro-Me senté en la cama y lo dejaría hacer lo que se le diera la gana, si quería se iba y si no quería se quedaría aquí conmigo.

-___(tn) es que…Tenemos que ser fuertes. ¿Por qué dejaste de comer? Si comieras  no hubieran discusiones-Lo miré a los ojos y supo porque no comía-¡Maldita sea! Podemos hacer otro. ¿Quieres otro bebé? Lo podemos hacer ahora mismo si quieres. Perdimos algo que amábamos y ¿Ahora quieres dejarme sin algo más?-¡Dios Santo! Sí que sufría…Yo lo estaba haciendo sufrir.

-No quiero otro…Quería ese…-Él iba a comenzar a hablar pero no lo deje-Déjame hablar. Lo perdí ¿Fue culpa tuya? No-Respondí mi pregunta-¿Fue culpa mía? Sí, porque yo deje que la zorra esa me sacara de casillas, yo deje que la rabia me invadiera, yo dejé que la puta esa se metiera en mi vida. No puedo culpar a nadie más que a mí-Estaba más que decepcionada de mí-Yo no tenía planeado quedar embarazada a los 17 años y mucho menos de una estrella como tú pero tampoco tenía planeado perderlo ni tener que abortarlo. Mi primer sueño no es ser madre, es ser una profesional y hacer lo que me gusta. Un bebé está en mi segundo o tercer plano, no en el primero. Luego tendremos tiempo para eso…Ahora…Solo tengo que aprender a ser fuerte y aceptar la desgraciada realidad.

-Amor…¿Tú por qué…?-No terminó la pregunta.

-¿Por qué me echo toda la culpa?-Pregunte imaginando que esa era su pregunta-Pues porque es la miserable verdad. Mi temperamento de paciencia es muy bajo y por mucho que lo intentara con la rubia oxigenada esa me la jodió completita.

-No. ¿Por qué eres tan cabeza dura?-Me abrazó fuerte-Te echas la culpa porque eres cabeza dura. Aquí ninguno tuvo la culpa, son cosas del destino.

-¿Crees en el destino?-Pregunte incrédula.

-Creo que sí y ahora el destino me dice que vas a comer-Camino hacia el escritorio donde estaba la laptop y cogió la comida y la soda.

-El destino ha errado querido-Rodé los ojos.

-Sé qué no amor…Si comes me harás más feliz de lo que soy ahora-¡Maldición!

-¡Mierda Taylor! ¿Por qué lo haces?-Reía. ¿Hace cuánto no reía?

-¿Hacer qué?-Dijo con esa sonrisita y ese coqueteo.

-¡TAYLOR!-Me quejé.

-¿Queeee?-Se hizo el inocente.

-¿Por qué lo logras?-Pregunte mientras le recibía el plato.

-¿Por qué consigues lo que quieres?-Contraatacó él.

-Sabes la respuesta  a tu pregunta así que no la hagas-me metí un bocado de comida a la boca ¿Qué mierda estaba comiendo?  Era arroz chino con pollo apanado-¿Hace cuánto no cocino?-Pregunté con comida en la boca, apenas tragué me reprendí a mí misma.

-Que de mal gusto es hablar con la boca llena-Rodé los ojos y Taylor rió.

-Desde hace tres meses no cocinas, no prestas atención a las clases, no comes, no duermes, ves y no ves tv, no hablas, nos ves a tu papá. Pareces un zombie ___(tn) estabas sin vida-Oh mierda.

-Lo siento, lo siento, lo siento-No solo estaba sufriendo Taylor, todos mis seres queridos estaban mal por mi tristeza y mi comportamiento.

-No te tienes que disculpar conmigo y lo sabes muy bien-Tenía razón. Terminé de cenar y salí de la habitación, nadie voltio a mirarme, ni el mismo Michael que ahora era mi mejor amigo.

-¿Ya no existo?-Pregunte aun parada en el marco de la puerta.

-¿Ya volviste?-Contraatacó Pablo.

-Siempre he estado aquí-Contraataqué yo.

-Te fuiste hace tres meses bruja-Dijo Carla. Yo me quedé callada.

-___(tn) sabes que Carla tiene razón-Dijo Stepha.

-Y ¿A Michael se le comieron la lengua los ratones? ¿Por qué no dice algo en mi contra?-Solo faltaba él para que yo estuviera hecha.

-No tengo nada que decir porque lo sabes todo. Me abandonaste ___(tn), ahora no tengo a alguien que me escuche. La amiga loca a la que le golpee la cabeza se desvaneció sin que yo pudiera hacer algo para evitarlo ¿Cómo crees que me siento? ¿Qué crees que diré?

-Mieeeeerdaaaaaa-¿Qué más podía decir? Todo lo que decían era cierto y  yo nunca me di cuenta de cómo me estaba comportando, no me estaba dando cuenta de nada. Ni siquiera supe cómo habían pasado tres meses y yo seguía igual.

-No tanto que no haya alguien que te escuche Michael-Dijo Pablo-Llevo tres meses comiendo arroz chino y espaguetis con albóndigas. ¿Pueden creer eso? ¿Me merezco tremendo castigo? ¿Qué hice de malo?-Estaba bien dramático el estúpido ese.

-Pues dejar que me hundiera en el abismo. Dejar que la nena que les cocina con amor y hace lo que ustedes piden se fuera y se desvaneciera en la depresión, tú también eres culpable de tu castigo-No tenía nada más que decir.

-Tú misma te metiste allí y TÚ no dejaste que te sacáramos de allí-Me atacó.

-YA-Grite-Escuche suficiente. Estoy decidida a salir y ustedes hacen que me hunda más. Gracias por lo que me toca-Caminé directo a la cocina.

-Lo siento brujita y gracias por volver-Me sorprendió Carla abrazándome por la espalda.

-Mierda Carla. Primero soy yo-Dijo Pablo mientras la quitaba, me cargaba y hacia que diera vueltas-Te extrañé pendeja. ¿Harás comida?

-Tú siempre tan estúpido. Haré comida pero no ya-Le di un beso en la mejilla, menos mal nadie vio porque se nos voltearon las caras  y se lo di en la mitad de los labios. Me separé inmediatamente de él y traté de organizar mis prendas.

-Te amo hermanita-Dijo Stepha mientras besaba mi frente.

-Yo más mi muñequita-Despeluqué su cabello.

-Tengo tanto que contarte estúpida-Se acercó Michael e hizo lo mismo que Pablo.

-Luego hablaremos…Ahora suéltame-Dije mientras protestaba.  Pasamos la noche hablando, comiendo galletas, chocolates,  papitas fritas, helado y todos me contaron cada cosa que me había perdido.

-¿No les parece que esta tarde?-Pregunte de repente-Ya tengo sueñito-Me rasqué los ojos.

-¿Vamos arriba?-Pregunto Taylor.

-Claro amor-Dije sonriendo-Nos vemos mañana chicos-Me despedí y salí del depto. con Taylor. Subimos a su depto. nos bañamos sin que nada pasara, me coloque una de las pijamas que tenía allá y nos acostamos. Encendí la tv y empecé a pasar los canales rápidamente, llegué al canal de Hollywood y lo dejé allí, me llamo la atención lo que decían de Taylor y de mi “Depresión” hasta en la misma televisión decía que parecía un zombie y que estaba flaca. Apagué la tv, bese a Taylor y cerré mis ojos. Lo último que sentí fue que Taylor beso mi frente. Después de unos minutos me perdí en la inconciencia pero no veía nada, solo oscuridad, la oscuridad no me asustaba, solo que… No me gustaba estar todo el tiempo a oscuras y no ver que tenía a mi alrededor, empecé a caminar por todas partes y a tropezar con todo hasta que no pude más y empecé a sentir punzadas, en mi estómago y mi entre pierna. De nuevo gritaba como loca y no paraba de llorar.

-Amor, amor, amor ¿Qué es lo que pasa?-Taylor empezó a moverme el brazo y me levantó del todo con un solo brazo, quede sentada-¿Qué tienes?-Empezó a acariciarme el cabello-¿Estas sudando?-Toco mi frente, estaba sudando hasta la gota gorda-Ya está pasando tan seguido que me está asustando.

-¿Qué pasa tan seguido?-Ya no entendía.

-Que grites dormida y llores-¿Qué mierda…? Y ¿Yo por qué no me daba cuenta?

-¿Desde cuándo?-Pregunte en voz alta-No hace falta que me lo respondas. Quiero hacer algo…Necesito hacer algo a ver si me  puedo…No sé qué mierda hacer-Me sentía extraña, como si no hubiera vivido ni hecho nada en todo el día.

-¿Cómo que cosas quieres hacer?-Estaba picaron.

-Cosas que me distraigan, eso es lo que necesito-Jugué su mismo juego, empecé con mi tono picaron.

-¿Qué quieres hacer?-Repitió mientras se me acercaba y me obligaba a recostarme del todo.

-Cosas que me distraigan-Repetí mientras me mordía el lado inferior, tener esos labios tan cerca y no besarlos todavía.

-¿Qué quieres hacer?-Repitió de nuevo con ademan de besarme pero no lo hacía.

-Ya te dije que quería amor, así que no me hagas esperar más-No me aguante y empecé yo el beso.

-¿Cómo quieres?-Cambio la pregunta.

-Que me distraiga-Repetí teniendo sus labios en los míos. Jugamos salvaje pero con amor, eso era lo que hacíamos. Era primera vez que lo hacíamos, bueno, por lo menos yo de esa manera y…Fue…Sin palabras, espectacular, todo tan…

Desperté toda sudada, pero esta vez no fue por un terrible sueño sino por una follada que no era imaginable. Reí por mis pensamientos y le di un beso en el cabello a Taylor, no lo quería despertar hasta no hacer el desayuno. Me levante, me bañé, me coloqué un vestido que tenía allá y caminé a la cocina, mi hermoso novio parecía privado, no se despertó por el ruido que hice. Dormía como ángel. Preparé Hot Cakes, jugo de naranja y yo solo comería ensalada de frutas con crema chantillí.

Las llevé al cuarto y desperté a mi chico a besos.

-No seas perezoso amor. Levántate-Le susurré en el cuello y él sonrío-Amor-Repetí en su cuello-Me enojaré-Murmuré en su oreja y le di un beso en la mejilla. Estiro sus manos y se sentó  en la cama, después de un rato abrió los ojos y me siguió sonriendo mientras me besaba.

-Me sabes a Chantillí-Dijo entre el beso.

-Estaba comiendo chantillí-Dije entre risas, me encantaba esa crema y había llevado la bolsa completa al cuarto.

-¿Me das?-Pregunto picaron.

-¿En dónde la quieres?-Pregunte en el mismo tono. No me contestó y me la quito de la mano, me hecho un poco en el labio inferior que sobresalía un poco y me besó de nuevo.

-Allí la quiero-Contestó cuando termino con la crema chantillí.

-Si quieres te la comes toda allí, no me quejaría-Dije entre risas.

-Tú lo dijiste-Ni siquiera se hizo el rogado, me volvió a echar crema y me volvió a besar y así hizo unas cuantas veces más.

-Ahora come de verdad que nos tenemos que ir-Esta vez lo besé yo y luego lo solté y me alejé un poco para que pudiera comer tranquilo y yo igual.

-¿A dónde?-Pregunto con comida en la boca.

-No lo sé-No sabía pero había recibido un sms “Salimos a las 12” y eran como las 11:00am y Taylor no se había organizado-¿Tienes que hacer algo hoy?-Pregunte mientras me miraba al espejo y pensaba que hacer para disimular mis ojeras. Taylor salió del baño en bóxer, apenas lo vi me mordí el labio inferior.

-¿Qué?-Pregunto confuso por mi expresión, cuando se dio cuanta lo que veía se volvió picaron-Tu pides yo doy-Sonrió acercándose.

-Tenemos que bajar dentro de poco-Me tapé con una almohada para que la tentación no me ganara, él empezó a reírse a carcajadas-No es gracioso-Me quejé mientras miraba como se vestía. Quería impedirlo pero teníamos que irnos.

-Si es gracioso-Contraatacó él.

-¿Por qué es gracioso?-Le pregunte expectante.

-Por tu cara-Rió más al decirlo.

-¿Qué tiene mi cara?-No me parcia gracioso.

-La expresión que hiciste era toda…Si te hubieras visto estarías muerta de risa-Se tenía el estómago de la risa.

-Es que…Es difícil dejar que te vistas-Me quejé ruborizada.

-Entonces impídelo-Jamás se hacia el rogado.

-No puedo…Ya deberíamos de estar abajo son las 11:58 y el sms decía “A las 12 salimos” y tengo que ir a…Necesito unas cosas de mi cuarto, se me olvida traer el neceser y sabes que no me siento bien-Estaba haciendo puchero-Ni siquiera tenemos los 5 minutos de un…No tenemos los 5 minutos-Casi pero casi se me zafa lo que iba a decir y me sonrojé.

-Polvito-Termino mi frase sonriendo, estaba más roja que el mismo tomate.

-¿Vamos?-Pregunte mientras gateaba en la cama hasta llegar a la orilla, se me enredó el pie en las sabanas y caí dando vueltas al piso. Taylor a los minutos llegó a mí y yo no paraba de reír.

-¿De qué te ríes? ¿Si te lastimas que pasa?-Estaba serio pero cuando yo lo miré a la cara se rió conmigo.

-Fue gracioso-Admití entre risas.

-Sí, ¿El suelo te parece atractivo? Vives de caída en caída-Sonreía aguantando sus risas para tratar de hablar un poco serio, cosa que no le salió.

-Me parece tan atractivo que le quería dar un beso pero aterricé de nalgas-Me empecé a sobar, él se rió más de lo que dije.

-Ahora si vamos-Se paró del suelo y me tendió la mano para ayudarme a mí pero no utilicé la más mínima fuerza él mientras yo agarraba su mano tendió la otra y me levanto. Ya parada me dolió un poco más.

-Me duele mi nalguita-Me quejé mientras me sobaba, él quitó mi mano y colocó la suya.

-Ya la toqué yo. ya se curará-Dijo mientras me daba un beso en la frente y salía del depto. seguí detrás de él mientras que bajábamos a mi depto. cuando llegamos entré a mi habitación y me organicé con lo mío, ya me sentía mejor.

-Estoy lista-Dije mientras salía de mi cuarto y cerraba la puerta a mi espalda.

-Deberías llevar un neceser arriba, ya son las 12:30-Se quejó Taylor.

-Lo siento-Le hice ojitos-Luego me lo recuerdas. ¿A dónde vamos?-Pregunté mientras me sentaba al lado de Taylor en el sofá.

-Día de aire libre. Taylor puede y tu volviste a la vida de todos así que todo será genial-Hablo Carla con una sonrisa muy particular en ella.

-Amor ¿Tu puedes?-Era sábado típico tendría algo para hacer, ahora tenía una reunión de trabajo para hacer un papel que no recuerdo.

-Cancelé la reunión por  qué es mejor salir y festejar que tú estás bien que una aburrida reunión para rechazar un papel que no me interesa-Volvió a besar mis cabellos.

-No es para tanto que yo me haya ausentado-Traté de que intentaran olvidarlo mientras caminábamos a la puerta pero el resultado fue.

-SI ES PARA MUCHO SEÑORITA. TRES MESES SON MUCHOS-Gritó Carla desde la puerta.

-Muchas gracias por gritarlo-Murmuré por lo bajo mientras cerraba la puerta de la salida a mi espalda.

-Escuche-¡Mierda!-De nada-Me picó un ojo.

-Ayudas mucho ¿Lo sabias?-Si tanto me extrañaba iba a empezar a hacer algo de su vida un asco.

-Claro que ayudo-Empezó mientras entraba al elevador.

-Cada que gritas la gente se va enterando más de MIS COSAS ¿Entiendes? MIAS que fueran tuyas y sí te quedarías jodidamente callada. Sabes cuánto me enoja que hablen de mí lo que no saben y que lo publiquen para que lo sepa todo el mundo-Estaba bien seria pero bromeaba. Hasta Taylor se asustó de mi cara.

-Pobre de la niña, que sufrida. Siento mucho estar en tu jodida vida. Siento haber entrado allí-De veras que estaba que lloraba.

-Brujita ¿EN SERIO?-Grite asombrada-Yo bromeaba ¿Cómo crees que yo me enojaré porque gritaste? Tú no tienes la culpa. La culpa la tienen ellos que no tienen una vida personal y propia-Caminé rápidamente tratando de cogerle el paso-Hey ven…Dame un abrazo, solo quería joderte. Solo eso, no te enojes ¡Por favor!-Me le paré en frente para que dejara de caminar-¡Mírame pendeja! Yo dije que estaba bromeando, lo digo enserio-La obligué a mirarme a la cara-Maldita sea Carla. Contigo no se puede bromear-Ya me cansé de decirle que era broma, seguí mi camino adelantándomeles a todos pero cuando llegue al auto el cual no quería conducir por lo enojada que estaba.

-Bruja no seas así-Se quejó Carla-Tu empezaste.

-Pero te había dicho que era un simple juego-Le dije yo enojada mientras abría la puerta del copiloto y le entregaba las llaves a Taylor.

-Dame un abrazo brujita. Ya entendí que era un juego-Intento girarme, no me hice la dura y me gire. Por poco y se me monta encima la enana esa.

-Carla no se vale cargarte ¿Ok?-Todos empezaron a reírse.

-Exagerada-Bufó mientras se subía al asiento trasero.