Capitulo 7: Dejando el temor.

Welcome to the party - J Alvarez.

**Bienvenidas al party aquí se vale to' Dile a tu amiga que pase porque el party ya empezó Yeah! Dile que hay de to' y que hasta sobra Dile que el party es en mi casa y que entrada no se cobra**

Dejé mi miedo y bailé como si le estuviera bailando a mi novio. Creo que hasta un poco más sensual. Ojalá él no estuviera por aquí o sino, me arma una grande.

Sonó como la mitad de la canción y luego pasó a una parte de Novee Novaa. Me puse a mover mis caderas y saltar mientras gritaba como loca y me resbalaba un poco en las espuma y el chico con el que bailaba se reía -Ese sonidito se me hacía conocido- Luego paso a Loba de J Alvarez, morí con ese tema. Después de esa gran mezcla pasamos a el himno electrónico. Entre todo ese salto intenté tratar la espuma que nos tapaba los rostros a ambos y me voy con la gran sorpresa de que era el mejor amigo de mi novio. ¿Qué mierda estaba pasando aquí? Me quedé estática en cuestión de segundos. Hoy sería mi día de muerte, ¡Adiós Londres! No te conoceré, hoy me darán muerte súbita.

En ese momento en el que quería que la tierra se abriera y me tragara llegó Anabella y me sacó de allí para encontrarme con la persona que quería ver. No sabía que decir pero de seguro en este momento no me preguntaría. Mientras tanto me preocupé por pasarla bien mi última noche de fiesta en Venezuela y sobre todo tratar de complacer en la mayoría de cosas a mi novio, ya que él no viajaría conmigo.

Así se nos pasó la gran noche, llena de espuma, licor, humo, más espuma, más licor, más humo. Anabella se emborrachó y Sammy me ayudó con ella mientras la llevábamos de vuelta al carro que nos esperaba desde tan temprano. Mientras que dejábamos a Ana en el auto ella habló mierda hasta por los codos y por poco y se le sale mi secreto más preciado. Si no es porque se pega una gran golpiza con la puerta del auto lo revela y ahora si sería más que cierto que no conocería Londres. Cayó inconsciente tendida en la parte trasera del auto y Sammy se aseguró de que no le pasara nada malo.

Mientras Sammy organizaba a Bella en el auto y la acomodaba de forma que no le quedara tan incomoda y si se levantaba a vomitar tuviera lista la ventana yo caminé con David por el corto cesped que había al frente de la discoteca.

─Hoy pasó algo que no esperaba que pasara─Hablé por primera vez fuera de la disco. Él me abrazó por la cintura y me apegó mucho a su cuerpo como siempre lo hacía, y como a mí me gustaba.

─¿Qué pasó mi bebesota hermosa?─Preguntó con ese tono suyo tan encantador y tan...tan de él.

─Pues ¿Qué quieres que te cuente primero?─Pregunté mientras sonreía y me  paraba frente a él y le pasé mis brazos por sus hombros─Lo malo es que las dos son malas─Le hice puchero.

─Empieza por la que quieras, daría igual ya que las dos son malas ¿Me dolerán mucho?─Amaba su voz, era algo que no cambiaría por nada en el mundo.