Capitulo 16, 17 & 18.

-Así me gusta, bien juiciosa ¿ok?-Le dije mientras colocaba el cuenco en el lava platos-Si pudiera te acompañaría hermanita pero sabes que hoy tengo prueba de biología-Le dije mientras le daba un beso en la mejilla-Adiós y no hagas tonterías-Dije mientras caminaba hacia el garaje.

-___(tn) ¿No se te queda algo?-Me grito Stepha, yo ya iba por el pasillo que llegaba al garaje, memorice todo lo que tenía que llevar y me di cuenta que había dejado mi tula.

-Mierda!-Murmure mientras me devolvía-Y ¿dónde está la maldita esa?-Dije mientras llegaba de nuevo a la cocina y empezaba a buscarla.

-Aquí esta tarada-Dijo Stepha mientras me la tiraba.

-Gracias muñeca-Dije mientras me la colocaba-Te quiero-Le dije mientras caminaba de vuelta al garaje, cuando llegue al garaje, subí al auto y comencé mi camino hacia la escuela, cuando iba saliendo de la casa me fui quitando la tula y la coloque en el asiento del lado, llegue al semáforo y saque el ¡pod y la BB, conecte el ¡pod al carro y comencé a escuchar música a todo volumen estaba sonando la canción one night de cobra starship y encendí la BB, la volví a guardar y cuando cambio el semáforo, seguí mi camino.

Llegue al cole y me estacione en mi puesto habitual, un poco alejado de los demás. Cogi mis cosas, desconecte el ¡pod y le coloque los auriculares, me los coloque y me baje del auto, aun escuchando música, siempre tengo que estar escuchando música, cuando estoy haciendo cualquier taller, si estoy en gimnasia y en el lugar donde no debo escuchar que es en las clases de guitarra, sigo escuchando música en el tiempo libre. Es decir el ¡pod es una extensión de mi cuerpo.

-Hola ___(tn), nunca te quitas esa cosa ¿Cierto?-Dijo Mike, que estaba a un recostado en el poste del edificio.

-Hola Mike, esto es una extensión de mi cuerpo y lo sabes-Le dije riendo-Si no estoy con el no soy ___(tn)

-No pues, tan graciosa-Dijo la maldita sea, no se su nombre, pero la odio por ser tan envidiosa, las personas envidiosas me caen de la patada.

-Aja, y ¿Quién te dijo que escuchara?-Dije mientras miraba a la perra esta de arriba abajo, que mal vestida estaba-Y yo no te he dicho que te rías-Dije mientras alzaba la ceja.

-Todo lo que escuche mi novio lo escuchare yo ¿ok?-Dijo la muy cínica esa.

-Bah Mike, cuando no tengas a este chicle al lado tuyo y cuando te consigas una novia que se sepa vestir hablamos y charlamos un rato, por ahora piérdete con tu payasa-Le dije y seguí mi camino. Me senté en una de las bancas de afuera aún faltaban como 30 minutos para entrar a clases, primera vez que llegaba tan temprano. Saque el libro que me estaba leyendo, La huésped de Stephanie Meyer. Hasta para leer tengo que escuchar música. Sentí que tocaron el timbre para entrar a la primera hora de clases. Cerré el libro y empecé a caminar rumbo a la primera clase de hoy, primero me tocaba historia, llegue al salón y me senté en el mismo puesto de siempre, empezó la clase y yo todavía no había guardado el ¡pod, como no me habían llamado la atención me quede con los auriculares puestos y mire por la ventana, hablando bien serio no me gusta mucho la historia, solo es teoría, nadie sabe si aquello que tanto cuentan si paso o no pasó nada.

-Señorita Biggs ¿Quiere decirnos usted que sabe respecto al tema?-Dijo el profesor llamando mi atención y haciendo que todos los chicos de la clase me miraran, no me gusta eso de ser el centro de atención, me ruborice un poco porque vi que el chico de ojos azules también me miraba, eso era más que imposible, ese chico no miraba a nadie ni para que le escupiera. Cuando pose mi mirada en el chico este me sonrió.

-No señor, no sé nada del tema y me gustaría que usted hablara más de él, de pronto se me queda algo-Dije mientras apartaba mi mirada de aquel chico.

-Si quieres que se te quede algo tienes que quitarte esa cosa que tienes puesta y prestar atención a la clase-Dijo el profesor y yo de inmediato me quite los auriculares-Como les decía alumnos esto paso…..

Que aburrido es esto, guarde el ¡pod y me puse a mirar al chico de ojos azules, no sabía cómo se llamaba y este sí que prestaba atención a la clase, ¿Le gustaba historia? Segurísima que si me hablara o me diera la oportunidad yo le enseñaría la mía. Que morbosa soy. Sonó el timbre para que cambiáramos de clase, el chico este se paró y sin mirar atrás se fue, yo guarde mis cosas e hice lo mismo, seguía la clase de gimnasia, la odiaba un poco, cuando llegue al coliseo entre a los vestieres y en mi casillero guarde mi tula con todo dentro y empecé a desvestirme para colocarme la ropa deportiva que tengo que guardar aquí. Cuando termine de vestirme salí del vestier. Camine y me pose al lado del profesor, este empezó con su discurso de siempre y dijo que unos jugarían tenis mientras otros jugaban voleyball, desgraciadamente a mí me tocaba jugar vóley primero soy malísima para ese deporte.

Empecé con mi “Juego”  me gustaba hacerme en el puesto último, allí no llegaba tanto la pelota así que jugaría menos. Seguí pendiente de que la pelota no me llegara pero no me puse pendiente de que la otra no me golpeara. Me dieron un gran golpe en la cabeza, tan duro que caí al piso, empecé a sobarme la cabeza y alguien empezó a correr en mi dirección, estaba más que mareada, todo me daba vueltas, ya veía estrellitas y corazoncitos en el aire.

-¿Te duele mucho?-Pregunto alguien que me cogió de la cintura y me ayudo a parar, yo ni sabía quién era, no reconocía su voz, hay no, ¿será que si hay estrellitas y corazones? Aun los veo-Profesor, creo que es mejor llevarla a enfermería ¿Cuántos dedos vez?-Dijo la misma voz masculina.

-No, no, definitivamente no-Dije de golpe, me enferma más la enfermería que el simple balonazo que me dieron-fue solo un gran golpe y nada más, no necesito ir a ninguna enfermería por nada del mundo ¿Entiendes?-Dije y me separe del chico que me tenía agarrada de la cintura.

-Creo que es una contusión está hablando más de la cuenta e incoherencias-Dijo el mismo chico.

-Bah, ¿En serio me vas a llevar a enfermería por eso? Hablo más de la cuenta e incoherencias todo el tiempo-Le dije mientras colocaba los ojos en blanco-Ese golpe hizo que se me zafara un tornillo más, de todas maneras ya estaba loca así que yo no le veo problema-Dije y pestañee varias veces, ahora si era capaz de ver bien todo lo que estaba a mi alrededor, el chico que me tenía agarrada de la cintura era…No podía ser él, ¿En serio era él? O ¿todavía andaba perdida con las estrellitas y demás? Fije mi mirada en aquel chico y cuando me encontré con sus ojos este me sonrió, definitivamente si era él.

-Perdón por el golpe-Me dijo sonriendo.

-Ohh, no hay problema…Emmmm…-Dije tratando de acordarme de su nombre pero ya que lo recuerdo no me lo sé.

-Michael-Dijo el sonriendo aún más-Yo soy Michael.

-Claro Michael, yo soy….-No me dejo terminar mi frase.

-___(tn)-Dijo él todavía con esa sonrisa, me fue imposible no sonreírle.

-¿Cómo lo sabes?-Le dije sonriéndole.

-Alumnos-Dijo el profesor interrumpiendo mi conversación con el chico de ojos azules, bueno, ya no le podía seguir diciendo así, ya me sabia su nombre, wow, era Michael y se sabía mi nombre ¿Qué tanto sabe de mí? Si yo solo lo veía desde lejos y jamás le había dicho ni “Hola”-ya veo que no fue grave el tremendo golpe que le diste señor Yorkings-Relato el profesor, ya que me lo recordaba me dolía mucho la cabeza-Sigamos con lo que empezamos.

-¿Otro golpe?-Dije-¿Esta loco?-Volví a decir-Si me dan otro así se los aseguro que me mataran-Dije de nuevo. Michael empezó a reírse.

-Qué más quisiera yo-Dijo la rubia oxigenada esa novia de Mike.

-Tenías que hablar tu maldita rubia-Dije mientras le echaba una mirada envenenada.

-Bueno señorita Biggs luego sigue con sus discursos y tonterías, por ahora vamos a terminar con mi clase-Dijo el profesor y pito con ese coso que tenía colgado en el cuello, ya que se a eso se le llama pito. Seguimos con lo que estábamos haciendo y sentía que alguien me miraba mucho, ya me sentía incomoda, el profesor nos pidió que hiciéramos cambio de juegos y de turno y ahora a mí me tocaba jugar tenis, me gusta un poco el tenis, ya no me dolía tanto la cabeza como antes.

Seguí con el miserable juego y digo miserable porque gane los dos primeros set y ahora me tocaba jugar con la zorra rubia esa, no sabía jugar y para rematar le tenía miedo a las pelotas. Me tocaba sacar de nuevo y yo como siempre de maliciosa se la tire duro, la pobre le dio con la punta de la raqueta a la pelota y casi me vuelve a dar en la cabeza, si no me agacho seguro que muero, ya iban dos golpes, ella se dejó llevar por tanta fuerza y se pegó durísimo en el hombro izquierdo, yo solo con verlo me dolió.

-Auuuh-Dijo ella mientras se sobaba y yo rompí en risas, me era imposible no reírme-Y  ¿Tu de que te ríes pendeja?

-Déjame ser feliz por un momento rubia oxigenada-Dije entre risas.

-Vamos a ver si te sigues riendo cuando te de tu buen golpe-Dijo ella mientras caminaba hacia mí. Yo cogí bien mi raqueta.

-Aja, maldita estúpida me colocas un dedo encima y veras que te dolerá el doble-Dije mientras le daba vueltas a mi raqueta. Ella dejo de caminar en mi dirección y cogió una pelota y me la tiro. Me pego en una pierna-Te lo advertí zorra-Le dije mientras le devolvía la pelota pero con mucha potencia, sin mentirles tengo mucha fuerza en las manos.

-Auuh-Se quejó ella-Eres una estúpida.

-¿Estúpida?-Dije-Yo no fui la que tire la maldita pelota primero, ya tienes tu merecido pendeja-Dije y para que a ella le diera más rabia no me mire ni me toque la pierna aunque me dolía mucho. En ese instante tocaron el timbre, tire mi raqueta al piso y por más que el profesor me dijo que la recogiera no le hice caso, estaba ardiendo de la rabia, entre a los vestieres de mujeres y volví a sacar mi ropa del casillero me vestí y mientras me quitaba ese maldito short tenía un semejante moretón en la pierna, me lo toque y me dolía más que la cabeza fue tanto el dolor que se me salió una lagrima. Maldita zorra, me vuelve a tocar y la hago pedazos. Salí del vestier y cuando estaba abriendo la puerta del coliseo alguien se paró a mi costado.

-¿Todavía te duele mucho la cabeza?-Dijo Michael, mientras me tocaba la cabeza por detrás.

-Aush-Dije mientras me sobaba.

-¿Así de duro te di?-Dijo el con cara de preocupación.

-No solo..-Dije tratando de excusarme y que se le quitara esa cara de terror que tenía-Solo fue…Bah, sabes que fue un sencillo golpe en la cabeza-Le dije riendo. El empezó a reírse.

-¿En serio que siempre dices incoherencias?-Dijo el entre risas.

-Sí, eso no es nada raro Michael, no tienes de que preocuparte si vamos al caso, ¡Estoy loca!-Le dije con una sonrisa, el seguía riendo-Bueno, es mejor que te deje de hablar, te asustarías.

-Tranquila, me acostumbrare-Dijo el mientras entrabamos a la cafetería, esta era la hora del receso y ahora tenía la prueba de biología-¿Almorzaras aquí o que vas a hacer?-Me pregunto Michael.

-No vale, iré a comprar una coca-cola y me sentare en mi lugar habitual-Le dije y empecé a caminar hacia la tienda escolar, el me siguió.

-¿Te acompaño?-Dijo el mientras intentaba cogerme el paso de nuevo.

-¿Tú no sales al receso con alguien más?-Le dije mientras hacia la fila.

-No-Dijo el apenado.

-Me parece algo extraño que alguien tan guapo y genial ande solo-Dije sonriendo, tratando que dejara esa pena que tenía.

-¿Sabes?-Dijo el pero yo como siempre lo interrumpí.

-Yo se muchas cosas-Dije.

-Ok, entonces respóndeme lo que te iba a preguntar-Dijo el sonriendo.

-Pregúntame-Respondí yo devolviéndole la sonrisa.

-Ahora te hare dos preguntas-Dijo el mientras miraba por encima de mi hombro, yo iba a girarme para ver el a donde miraba pero ya habíamos llegado a la tienda así que pedí lo que quería y el pidió solo un refresco de limón. Seguí mi camino y como de costumbre me senté en el césped, al lado de un gran árbol que me daba sombra.

-Suelta tus preguntas-Le dije mientras destapaba la coca-cola.

-¿Cuál quieres que te haga primero?-Dijo el mirándome.

-La que tú quieras, al fin y al cabo te responderé las dos ¿O no?-Le dije mientras lo miraba a los ojos-Que hermosos ojos tienes-Le dije, mierda, se lo dije, ¿cuándo voy a dejar en vicio de decir lo que pienso?

-Gracias, supongo-Dijo él sonriendo-¿Tienes problemas con Judy?-Empezó el con sus preguntas.

-Y ¿Quién es esa?-Le dije yo alzando la ceja, con la única que tenía problemas era con la rubiecita esa. El coloco los ojos en blanco.

-Pues la famosa novia de Mike-Contesto él.

-Mmm ya-Dije yo-¿Así se llama la pendeja esa?-Dije mientras me llenaba de rabia hasta nombre de perra tiene.

-Sí, así se llama, pero no me has contestado mi respuesta-Me dijo él mirándome la cara.

-Sí, disculpa, la verdad es que si tengo problemas con ella, no sé porque yo ando con mi mala suerte y a donde llegue me consigo una enemiga-Le dije de nuevo mirándolo a los ojos y se fue disminuyendo mi rabia.

-No hablemos más de eso-Dijo él.

-¿Cuál era tu otra pregunta?-Le dije curiosa.

-Pues te preguntare el comentario que hiciste hace poco-Dijo el sonriendo.

-Mierda! ¿Ya que dije?-Exclame en voz alta. El empezó a reírse.

-Nada malo y creo que tampoco te arrepientes-Dijo él entre risas.

-Bueno, si tú lo crees entonces pregunta-Dije mientras tomaba un sorbo de mi coca cola.

-Me parece extraño que una chica tan guapa, loca y genial ande sola ¿Por qué andas sola?-Dijo el verdaderamente curioso. Yo me ruborice de una manera no creible.

-Yy..ooo-Y tartamudee de lo nerviosa que estaba, no me daba pena de casi nada pero esa pregunta jamás me la habían formulado. ____(tn) deja que fluya! Repetía en mi mente-Te diré la verdad-Dije-Ando sola porque nadie me interesa aun, sé que suena extraño y por más que yo hable y chulee a los chicos que a mi parecer son lindos, siento que aún no llega esa persona especial con la cual pueda ‘andar’-Dije sin tapujos y haciendo énfasis en la palabra “andar”-Bueno, aunque no te mentiré he tenido chicos con los que paso bien fino en una fiesta pero de besos no paso.

-¿En serio?-Dijo el sorprendido-Yo pensé que tú eras más experta en este tema-Dijo él, yo ya sabía de qué tema estaba hablando.

-Que no haya hecho nada todavía no quiere decir que no sea una experta-Le dije y en eso sonó el timbre para que volviéramos a clases, me levante y seguí mi camino.