Introducción.

“No busco nada serio aún, estoy muy joven y quiero disfrutar mi vida” Creo que fueron sus palabras…¿O no? Bah, fue ya hace tiempo que se me está empezando a olvidar. Pero tuve que llegar a la conclusión de que le haré cambiar su forma de pensar.

No es para un mal, naturalmente no soy así. Cuando me gusta alguien, me gusta por su forma de ser, pero a Edward lo conocí de una manera tan extrañamente vergonzosa. Basta con decir que caí en sus brazos mientras su madre le gritaba “Edward…Harold Edward no lo hagas” 

Fue así como empecé a sentir atracción por él, caer en sus brazos, verlo morder su labio inferior, mirar a su madre cariñosamente y luego desafiante porque le estaba prohibiendo hacer algo que quería realmente y su hermosa sonrisa me dejó completamente petrificada y así hayan pasado meses sigue afectándome de la misma manera.

Desde la primera vez que lo vi sabía que era el chico que andaba buscando desde que sufrí un terrorífico quebranto con mi primer amor. Sólo hubo un pequeño pero grande problema “Es mujeriego y le gustan las mayores que él, nunca llegará a fijarse en ti” fueron las palabras de la chica de al lado,  podía sentir su poderosa envidia en el aire, pero por alguna estúpida razón le creí.

Ahora que sé tengo un poco de su atención quiero hacerle cambiar eso o  hacerle caer en cuenta que a parte de su manera existen muchas más que funcionan a la perfección e imposibles de olvidar.

Yo, _____(tn) Woods era la típica chica nueva demasiado tímida y ruborizada como naturalidad. Tengo 17 años y vine a caer aquí porque mi madre murió y sólo mi padre podía “Lidiar” conmigo. Ser nueva en un lugar no es mi fuerte, no me adapto rápidamente por mi estúpida torpeza tan frecuente. He llegado a la conclusión de que tanta torpeza se debe a los nervios e inseguridad que siempre he vivido.

Ahora intento dejar que mis pensamientos fluyan y tratar de no ser tan desaliñada para que mi imperfecto plan con Harry funcione, sí, esta vez lo llamé “Harry” recordé sus hermosos rulos y sus ojos perfectamente grises. Vuelvo a reír estúpidamente mientras entro al baño por una buena ducha.  Necesito algo relajante para poder iniciar con el pequeño cambio en mi vida, un cambio por un chico que me enciende completa.